Cómo descubrir tus potencialidades
Si ya eres un nativo digital o como yo te estás adentrando en la aventura del 2.0 con los conocimientos que da la experiencia, de seguro te preguntas si realmente tienes todo lo que se necesita para comenzar ese nuevo proyecto empresarial que tanto te entusiasma.
La verdad es que todos nos hacemos esa pregunta alguna o muchas veces en la vida. En especial ahora que siempre que vas a la web a investigar sobre lo que se necesita (a nivel personal) para abrir tu propio negocio, startup o sitio web, te manda a hacerte un examen de conciencia bastante extenso que a cualquiera puede poner nervioso, pues es tan íntimo, personal que nunca antes se te habría ocurrido preguntarte tales cosas.
Sin embargo, descubrir tus potencialidades es la manifestación más elevada que puedes tener sobre ti mismo. Hará que tu gran proyecto, se monetice y realmente puedas ofrecer un valor real a tus clientes potenciales y usuario. Pero de seguro eso ya lo sabes y lo que necesitas es tener una idea de por dónde comenzar a descubrir tus potencialidades.
Lo primero que debes saber sobre tus potencialidades es que no están súper ocultas, sino que forman parte de tu día a día, solo que aún no tienes plena conciencia de ello. Lo segundo es que no se tratan de aptitudes intergalácticas ni mucho menos, sino de cualidades comunes que al ser explotadas logran resultados increíbles.
Cómo descubrir tus potencialidades paso a paso
Ahora, respondiendo a la pregunta que nos concierne, es de saber que no existe una fórmula única, ni nadie que sea plenamente confiable vendrá a decirte con exactitud estas son tus cualidades. Es algo que te concierte solo a ti descubrir para realmente poder asimilarlo, lo que te ofrezco es una guía que puedes moldear a tu gusto para iniciar el camino.
Paso 1: Analiza. De forma consciente y sin auto-sabotaje intenta descubrir tus potencialidades analizando qué expresas en tu diario vivir. Hacia a dónde se inclinan tus preferencias, qué es lo que te gusta leer o ver, en qué eres bueno o buena, qué es lo que generalmente la gente dice de ti, qué tipo de actividades desarrollas con gran entusiasmo, sobre qué hablas constantemente, qué te gusta publicar en tus redes sociales.
Paso 2: Convierte. Quizás en tu análisis sientes que no encontraste nada nuevo, pero te invito a verlo desde otra perspectiva. Por ejemplo: Si te gusta leer novelas de ciencia ficción, pero nunca has tenido el valor de confesarlo porque tus colegas solo leen libros crecimiento empresarial y cómo mejorar las ventas y esto te hace sentir avergonzado, descuida, tengo un dato interesante para ti: eres un soñador que se deslumbra con las grandes ideas y gusta de explorar sus capacidades de asombro, lo cual a su vez se traduce en “curiosidad”, piezas fundamentales para crear nuevas ideas que transforman el mundo.
Paso 3: Filtra. Es muy común que después de aplicar el paso 1 y 2 descubras que no te expresas como realmente quisieras. O que simplemente te hayas sobrevalorado. En este paso, debes pensar en aterrizar tu auto-concepto. Analizando defectos y virtudes de la manera más imparcial que se pueda.
Paso 4: Proyecta. Una vez analizado la acciones concretas y haberlas expresado en aptitudes, filtrando la información obtenida, es hora de pulirlas un poco y empezar a ejecutarlas en la vida personal y profesional, esta vez de manera consciente y estratégica, proyectando los logros que deseas obtener y utilizando este nuevo conocimiento como herramientas para lograrlo.
Y bien, si te gustó esta entrada o quisieras agregar otro aspecto de valor, que esperas para dejar tu comentario al final de texto.
Dejar un comentario
¿Quieres unirte a la conversación?Siéntete libre de contribuir!